
La vox populi versa que, “No hay fecha que no se llegue, ni plazo que no se cumpla” Así que llegó el momento de cumplir con los deliciosos tamales para festejar el Día de la Candelaria. Tradición copada de signos, conceptos, prácticas y creencias con el sello
Cristocéntrico que dan vida a innumerables actos de piedad popular. Expresiones de fe, vivencia y cultura: fiestas patronales, peregrinaciones, templos iluminados con candelas, pasillos impregnados con la fragancia de la diversidad de flores ofrecidas a María. Así como jardines y atrios coloridos por las diversas vestimentas del Niño Jesús portados en grandes canastos o en los brazos de quienes, con fe, los presentan en el templo para ser bendecidos. Y qué decir, esperar con ansia el caer de la tarde para disfrutar en familia del rico sabor de los tamales, signo de alegre convivencia familiar…..