
“De toda la Iglesia subía incesantemente la oración a Dios”
(cf. Hch 12, 5)
Invocamos el fin de la pandemia unidos en el rezo del Rosario con los Santuarios de todo el mundo
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Subsidio Litúrgico-Pastoral
Mayo 2021
NOTAS INTRODUCTORIAS
El Papa Francisco pide que en el próximo mes de mayo toda la Iglesia pueda invocar la intercesión de la Bienaventurada Virgen María para el fin de la pandemia y, de manera particular, invita a elevar súplicas por los más afectados.
Cada día del mes de mayo, según un calendario con intenciones específicas, todos los Santuarios esparcidos por el mundo, unidos en una comunión de oración, dirigirán sus invocaciones, que como la fragancia del incienso se elevarán hacia el cielo.
Treinta santuarios marianos, uno por día [Véase el Apéndice], dirigirán el Rosario para toda la Iglesia y ofrecerán a los fieles una serie de momentos de oración para vivir a lo largo de la jornada.
– La oración de la mañana en el Santuario comenzará con el gesto simbólico del encendido de una lámpara colocada delante de la imagen de la Virgen. Inmediatamente después, se proclamará el pasaje de la Escritura tomado del capítulo 18 del Evangelio de Lucas. Al final, el celebrante introducirá el significado del gesto y del día, para luego rezar a la Virgen, con los fieles presentes con la antigua oración Sub tuum praesidium (Bajo tu amparo).
– El culmen de la jornada de oración en el Santuario será el rezo del Santo Rosario, según las tradiciones y costumbres locales, por el fin de la pandemia y por la intención especial diaria encomendada por el Papa Francisco, según las instrucciones dadas en el Esquema de Oración.
– Al final de la jornada, todos los fieles, reunidos en el Santuario se despedirán de la Virgen, cediendo idealmente el testimonio de la oración al siguiente Santuario.
Es importante resaltar que, además del rezo del Rosario, los Santuarios están invitados a animar toda la jornada con otros momentos de oración. Antes de cada acto de culto, el Celebrante debe recordar a los fieles el significado de esta iniciativa, incluyendo una intención en la oración de los fieles de las Santas Misas.
Cada Santuario deberá prever la participación de los fieles en las diversas celebraciones propuestas, siguiendo las normas sanitarias vigentes, exhortándoles también a rezar en sus propias casas y familias, cuando esto no sea posible.