
Querido Monseñor Raúl Gómez González, a nombre de nuestra Iglesia particular de Toluca en pleno, quiero expresarte la enorme alegría que sentimos al recibir la noticia de tu elección como nuestro nuevo arzobispo de Toluca. En la fe y con amor te recibimos como aquel a quien Dios eligió y destinó como sucesor de los apóstoles entre nosotros, para ser principio visible y garante de la unidad en nuestra Iglesia particular de Toluca (cf. LG 23), y continuador de la misión que Cristo encomendó a sus apóstoles, mediante el munus docendi (Apost. Suc. Cap. V), santificandi (Apost. Suc. Cap. VI) y regendi (Apost. Suc. Cap. VII).
Nuestra Iglesia particular de Toluca, concreción del Cuerpo Místico de Cristo, Pueblo de Dios, espera tu pastoreo (Apost. Suc. 3), como principio y fundamento visible de la unidad entre nosotros y con la Iglesia universal (Apost. Suc. 5), para que, en la comunión de todos entre sí y contigo, se lleve adelante la misión de anunciar y hacer presente el Reino de Dios (Apost. Suc. 7-8).
Entre los fieles cristianos laicos de nuestra Arquidiócesis, cada uno según su vocación y los dones recibidos del Espíritu Santo, existen muchos que están dispuestos a asumir, en comunión contigo, su derecho y deber de colaborar en la misión de la Iglesia (Apost. Suc. 108), conscientes de que su campo específico es el mundo (LG 32), en los complejos ámbitos de la política, lo social, lo económico, la cultura, la educación, el trabajo, las ciencias y las artes, siempre desde la Iglesia (EN 70). Unidos a estos fieles laicos, también aquellos que realizan algún ministerio eclesial, los que están asociados, los que pertenecen algún movimiento eclesial o grupo parroquial, te dan la más cordial bienvenida y todos te ofrecen su colaboración generosa.
Los miembros de la vida consagrada y de las sociedades de vida apostólica que tienen presencia en nuestra Arquidiócesis, permaneciendo fieles a su carisma fundacional, te ofrecen su apertura a colaborar espiritual y pastoralmente en las exigencias de la Iglesia particular de Toluca (Vita Consecrata 49; PG 50; Apost. Suc. 98). Sabiéndose pertenecientes a la vida de nuestra Arquidiócesis (Chr D 35), te expresan su alegría por haber sido tú el elegido por Dios para presidirnos en la caridad.
Los presbíteros que pertenecen a la Arquidiócesis de Toluca, como tus principales e insustituibles colaboradores, te manifestan su disponibilidad para relacionarse contigo como padre, hermano y amigo, a partir de tu caridad de pastor (Jn 13, 35; Chr D 28; Apost. Suc. 76; PG 47). Quieren conocerte más y mejor y te ofrecen su apertura para que los conozca, con el fin de poder formar con ellos una verdadera familia (Apost. Suc. 77). Cuenta siempre con su apoyo, desde los servicios específicos que cada uno de ellos desempeña, para llevar adelante la misión que nos viene de Cristo, el Señor (CIC c. 521).
Y, nosotros, tus hermanos obispos, nos ponemos a tus ordenes, nuestro respeto y obediencia a tu persona y a tu ministerio episcopal en la arquidiócesis de Toluca.
Que Cristo, el Pastor de los pastores, guíe siempre tu ministerio episcopal entre nosotros, y que Santa María de Guadalupe interceda por ti y por nosotros, para que podamos colaborar en la construcción de la “casita sagrada”, y ofrecerlo como nuestro tributo al cumplirse los quinientos años de las apariciones de la Virgen del Tepeyac al indio Juan Diego (2031) y los dos mil años del acontecimiento de la redención (2033). Seas bienvenido a nuestra Arquidiócesis de Toluca.
Toluca de San José, 21 de Marzo de 2022
Francisco Javier Chavolla Ramos
Administrador Apostólico de Toluca